Recientemente asistí a la presentación del Plan Estratégico de una
organización. El expositor presentó el plan de una forma impecable y clara. El
Plan tiene misión, objetivos, equipo, cronograma… pero, sucede que, aun no
estaban definidos los valores y se nos informó que aun trabajaban en eso.
Me que quedé pensando cuán relevantes son los valores
organizacionales . Los valores son esenciales; se constituyen en una guía clara
sobre cómo se espera que los integrantes de un equipo se comporten y tomen
decisiones . Se convierten en estándares éticos
que ayudan a mantener la coherencia en el comportamiento de todos los
miembros de la organización.
Los valores definen la identidad y la personalidad de
la organización, creando un ambiente en el que los miembros del equipo se
sientan identificados y comprometidos. Yo los imagino como los policías que
vigilan que todo se haga conforme a la ley. Son el marco ético para la toma de
decisiones. Cuando los empleados comprenden y comparten los valores de la
organización, es más probable que tomen decisiones alineadas con esos valores,
lo que puede ayudar a prevenir comportamientos inapropiados o poco éticos, y
dan espacio a que se pueda aludir a ellos si algo o alguien no encaja en el marco.
Los valores organizacionales pueden servir como un
lenguaje común dentro de la organización. Facilitan la comunicación y la
colaboración al proporcionar un conjunto de creencias compartidas que ayudan a
las personas a entenderse y trabajar juntas de manera más efectiva.
Los valores organizacionales pueden ayudar a alinear
la estrategia de la institución con sus
objetivos y acciones. Cuando los valores están arraigados en la cultura de la
organización, se convierten en un filtro a través del cual se evalúan las
decisiones estratégicas, asegurando que estén en línea con la misión y visión
de la empresa.
Las organizaciones que viven sus valores de manera
coherente pueden construir una sólida reputación en su entorno y generar
lealtad y credibilidad de los grupos de interés que corresponden.
Pero… también podemos tener definidos nuestros valores
personales. Seguro usted los tiene, y no necesariamente los ha definido. ¿Se
anima a hacer el ejercicio?