"Si no quieres perderte en el olvido tan pronto como estés muerto y enterrado,escribe cosas dignas de leerse, o mejor aún, haz cosas dignas de escribirse... - Benjamin Franklin


domingo, 29 de diciembre de 2013

jueves, 26 de diciembre de 2013

¡VAMOS POR EL ORO!




“Prosigo a la meta, al premio del supremo llamamiento de Dios en Cristo Jesús. (Filipenses 3:14 )

La competencia era por el oro; todos corrían con gran determinación, firmeza y decisión.  Algo me llamó la atención de los competidores, un joven en particular; su mirada estaba al frente, hacia la meta; no importaba quien venía al lado o detrás, su objetivo era la meta.  A su compañero más cercano le vi mirar hacia los lados, cosa que quizás no le permitió llegar a la meta en el tiempo establecido.

El Apóstol Pablo en la Biblia nos insta proseguir hacia la meta, al blanco, que es Cristo. No te detengas sobre la base de lo que otros hacen o dicen; juega limpio, no trates de engañar a los demás o a ti mismo, de nada vale.  Poniendo a un atleta como ejemplo, Pablo dice que éste no es coronado si no lucha legítimamente, y el autor de Hebreos plantea la necesidad de despojarnos de todo peso y del pecado que nos asedia como si tuviéramos cuerdas que se enredaran en nuestros pies. Entonces podremos correr con paciencia, estrategia que usan los corredores, reservando energías para tomar impulso en el momento más pertinente para llegar a la meta y obtener el trofeo.

 El apóstol Pablo nos enseña sobre la conducta a observar para llegar a la meta deseada. Veamos lo que nos dice en Filipenses 3:13,14:

1.- Conocer dónde estamos.- “Hermanos, yo mismo no pretendo haberlo ya alcanzado...”

2.- Determinación.- “una cosa hago”

3.- Liberarse ataduras pasadas.- “olvidando ciertamente lo que está detrás”

4.- Mirar y avanzar al futuro.- “... y extendiéndome a lo que está delante”

5.- Trazarse metas.- “Prosigo a la meta”

6.- Proponerse triunfar y luchar por triunfar.- “Para conseguir el premio”

7.- Alcanzar el propósito de Dios.- “del supremo llamamiento de Dios”

8.- Comunión con Cristo.- “...en Cristo Jesús”

Si tenemos en cuenta estos pasos la victoria está garantizada a pesar de todas las pruebas y tentaciones en el camino pues el Señor es nuestra seguridad plena en este andar de fe.

Mientras algunos aspiran a que el año nuevo sea mejor, otros nos proponemos ser nosotros mejores en el 2014. Y vamos por el oro con determinación. 

sábado, 14 de diciembre de 2013

INVOCACION



Señor, escucha mi oración,  atiende a mi súplica. Tú eres justo y fiel; ¡respóndeme! Pero no me juzgues con dureza, pues ante ti nadie puede justificarse.

Mi enemigo me ha perseguido con saña; ha puesto mi vida por los suelos. Me hace vivir en tinieblas, como los muertos. Mi espíritu está totalmente deprimido; tengo el corazón totalmente deshecho.

Cuando evoco los días de antaño, y me acuerdo de tus grandes proezas y pienso en todo lo que has hecho, elevo mis manos hacia ti, pues tengo sed de ti. ¡Soy como tierra seca!

Señor, ¡respóndeme, que mi espíritu se apaga! ¡No te escondas de mí, o seré contado entre los muertos! Muéstrame tu misericordia por la mañana, porque en ti he puesto mi confianza. Muéstrame el camino que debo seguir, porque en tus manos he puesto mi vida.

Señor, líbrame de mis enemigos, pues tú eres mi refugio. 10 Tú eres mi Dios; enséñame a hacer tu voluntad, y que tu buen espíritu me guíe por caminos rectos.

11 Señor, por tu nombre, vivifícame; por tu justicia, líbrame de la angustia; 12 por tu misericordia, acaba con mis enemigos; ¡destruye a los que atentan contra mi vida, porque yo soy tu siervo!

miércoles, 11 de diciembre de 2013

El SEÑOR ES MI PASTOR



Salmos 23
Nueva Biblia Latinoamericana de Hoy (NBLH)
Salmo de David.

 El Señor es mi pastor,
Nada me faltará.
En lugares de verdes pastos me hace descansar;
Junto a aguas de reposo me conduce.
El restaura mi alma;
Me guía por senderos de justicia
Por amor de Su nombre.
Aunque pase por el valle de sombra de muerte,
No temeré mal alguno, porque Tú estás conmigo;
Tu vara y Tu cayado me infunden aliento.
Tú preparas mesa delante de mí en presencia de mis enemigos;
Has ungido mi cabeza con aceite;
Mi copa está rebosando.
Ciertamente el bien y la misericordia me seguirán todos los días de mi vida,
Y en la casa del Señor moraré por largos días.

jueves, 5 de diciembre de 2013

NELSON MANDELA ¡HASTA SIEMPRE!

¡HASTA SIEMPRE MADIBA! 
No hay palabras suficientes para contar sus méritos. 
No hay palabras, más que resignarnos al ver que este día llegaría.
Que nadie olvide ni borre tu historia. 


domingo, 1 de diciembre de 2013

PERDONAR, HE AHÍ EL DILEMA.



Siendo seres humanos en interacción con otros, estamos constantemente expuestos a recibir ofensas y a ofender. Dios está consciente de esta situación y no descarta que suceda aun  entre creyentes, familiares y seres queridos. La verdad es que en esos medios es que más suele ocurrir. Por eso la Palabra de Dios nos guía a perdonar y pedir perdón, y nos insta a amar, pues el amor es el único medio de olvidar ofensas y sanar heridas.                 
Debe ser incómodo estar sentado en el mismo banco o la misma fila en el templo, cerca de alguien con quien tenemos alguna “diferencia” (para no usar un término muy fuerte), o quizá sea preferible decirlo con  más precisión, una enemistad o un problema de ofensas. Es difícil ser objetivos al pensar de nosotros mismos en ese aspecto, (la culpa no fue nuestra, sino del otro, yo estoy bien con Dios, y él fue quien me hirió, quien me ofendió, quien conspiró contra mi). Dar el primer paso hacia la reconciliación es quizás la parte más dura para resolver el problema, aunque sea usted el agraviado y no el otro. Si hemos ofendido a algún hermano, es doloroso pero es necesario dejar a un lado  el orgullo y buscar el perdón de la otra persona.

Si no lo ha experimentado, créame que en la reconciliación hay una descarga deliciosa de paz y purificación de la conciencia que nos hace ver cuán amargo y corrosivo es para el espíritu guardar rencores e iras contra nuestros hermanos.      Alguien dijo: “Perdonar es poner en libertad a un prisionero, y descubrir que el prisionero… eres Tú”

EN PELIGRO DE EXTINCION


Hace 5 o 6 años que le compré los primeros libros… bajo el candente sol mañanero de un domingo, al detenerse mi automóvil en la intersección de aquellas avenidas, es frecuente que me aborden vendedores de periódicos,  tarjetas y accesorios de teléfono, frutas y chucherías. Pero él tiene la exclusividad de ser el  vendedor de libros.

Lo he visto enflaquecer, desmejorarse. He visto su ropaje agrandarse mientras él se diluye dentro. Los libros en su  hombro como cada vez. Antes me reconocía de lejos e intentaba siempre que repitiera el gesto de comprarle algo; hoy pasa por mi lado en su patética procesión y lo siento ajeno,  y  no parece ya distinguir silueta alguna.

Muchos presagian la inminente muerte del libro.  Las librerías cierran una a una sus puertas olvidadas de la gracia de esta generación y  mi amigo el vendedor de libros parece diluirse a la par. Me asusta su semblante, su pérdida de peso y su abundante barba.  Hoy, me propuse que llevaré conmigo algo de dinero la próxima semana, para comprarle un libro, pues temo que pronto solo me encontraré con su sombra, y luego con su recuerdo. 
 (Foto: buenalectura.wordpress.com)