"Si no quieres perderte en el olvido tan pronto como estés muerto y enterrado,escribe cosas dignas de leerse, o mejor aún, haz cosas dignas de escribirse... - Benjamin Franklin


lunes, 25 de septiembre de 2023

LA LECTURA DE LA BIBLIA PROVEE VALOR ESPIRITUAL, EMOCIONAL Y CULTURAL

Escrito por Telesforo Isaac

Leo la Santa Biblia, porque en esas milenarias escrituras hay resúmenes de sabiduría, poesía, nociones históricas, ejemplos de héroes, semblanzas de mujeres ejemplares, meditaciones que ayudan a elevar el espíritu, imágenes de figuras épicas, ilustraciones de ética y moralidad, trazos de literatura de singular elocuencia, orientaciones para alcanzar  metas anheladas, ejemplos de códigos para la disciplina,  prototipos de buenos principios del comportamiento personal y grupal, tipificaciones de  valores y virtudes esenciales; asimismo, sirve de curativo a la mente distorsionada, así también, ofrece elementos para calmar la ansiedad y relajar la depresión.

Leo las Sagradas Escrituras, porque esa lectura y la meditación, me ayudan a orientar mi existencia en este terruño donde se necesita continuo estímulo para mantenerse correcto, virtuoso, templado, y enfocado en la dirección para no “seguir el consejo de los malvados”, ni transitar por “el camino de los impenitentes”; más bien, sentir que puedo tener la seguridad de la cercanía y sostén del Divino Pastor. Escudriño los Evangelios, pues, en esa lectura y reflexión obtengo respuesta para soslayar el sufrimiento, angustia, congoja, dudas, soledad, miedo, dolor o muerte.

El Nuevo Testamento es fuente de inspiración para tener confidencia plena en Jesucristo el Hijo de Dios, el Pastor que nos brinda confianza y nos guía, porque, aunque andemos en “valle de sombra de muerte, no temeremos”. (Salmo 23:4). Leer y acertar la fe que Jesús es el Pastor que quita el miedo, alivia el sufrimiento, fortalece el espíritu, y ahuyenta el temor, es confortable; ya que: cuyo cayado nos dirige por caminos rectos, y nos acompaña en los tenebrosos momentos, cuando pasamos por oscuros caminos de angustia y malestar.

Reflexionar en los salmos, sirve para alentar el deprimido estado anímico, porque nos dicen: “Los que confían en el Señor, son inconmovibles”, en Él hay aliento y sostén.

Estudiar las Santas Escrituras puede dar alivio cuando nos sentimos descorazonados; puede ser aliento cuando estamos turbados; puede iluminarnos cuando estamos desorientados, como también, o cuando la debilidad espiritual nos agobia.

Repasar lo escrito acerca de Jesús el Nazareno, nos reanima y vigoriza.

  • Cuando estamos enfermos: Él es nuestro médico.
  • Ante el temor de hostilidad: nuestra fe en Él nos trae Paz.
  • Ante el fin de la vida mortal: Él nos asegura la vida eterna.
  • Ante la agitación de la vida cotidiana: Él nos proporciona tranquilidad.
  • En la lucha, Cristo nos sostiene.
  • En la tentación, nos previene.
  • En el dolor, nos conforta.
  • En el pecado, nos perdona.
  • En la desgracia, nos brinda socorro.
  • En la búsqueda, nos dirige.
  • En la muerte, nos recibe.

lunes, 18 de septiembre de 2023

DIVINA PERFECCION

 


La perfección como atributo de Dios fue el tema de reflexión en una reunión de la que fui parte recientemente. Los presentes que comentaron coincidieron en que el tema es difícil. El concepto puede ser idealista, utópico y abstracto.

Ciertamente, en mi condición humana me cuesta encontrar una forma de definir la perfección. En el diccionario hallo que el significado de "perfecto" se refiere a algo que está completo, sin defectos, fallos o imperfecciones. Perfección es todo lo bueno e ideal que se pueda ser en modo superlativo. ¿A Quién o qué podríamos atribuirle perfección?

Dios es perfecto, impecable. Es al único que le queda este atributo. No comete errores. Esta condición divina muchas veces no es tan evidente para muchos, al contrastarla con las realidades adversas que nos rodean en un mundo fallido.

Dios es Perfecto. ¿Qué significado puede tener esto para una persona? Su perfección debería tener un profundo impacto en la forma en que vivimos y la forma en que nos relacionamos con Dios.

Cuando pienso en la perfección de Dios, me pregunto como el Salmista ¿Qué es el hombre para que de él te acuerdes, y el hijo del hombre para que lo cuides?” (Salmo 8). Me siento pequeña e inadecuada para tener la osadía de acercarme a su magnífica presencia.

Dios es perfecto. La escritura dice que” En cuanto a Dios, su camino es perfecto” 2 Samuel 22:31)

Su Palabra y su obra también lo son. No puedo explicarlo, pero puedo percibirlo. Su perfección me invita a confiar en Él y aceptar lo que Él hace y permite. Su perfección me invita a procurar agradarle, teniendo el cuidado de crecer en la gracia que Él ha provisto, a madurar en ese camino de ser mejor que ayer, eso que Jesús dijo que debe ser mi aspiración e ideal: Caminar hacia la perfección del Padre. Es lo que Pablo anhelaba, sin haberlo alcanzado, lo tenía como meta, y proseguía hacia ella.  

lunes, 11 de septiembre de 2023

¿COMPRADORA COMPULSIVA YO?

 

Me encanta ir de compras. Es un recreo en mi agenda, que usualmente está concentrada en vida hogareña/familiar,  trabajo  constante y actividades de la iglesia.   Trato de llegar a las tiendas con una determinación: Tengo un presupuesto que respetar, y un nivel de autoindulgencia que restringir.  A veces,  en medio de la disyuntiva de comprar o no comprar ciertas cosas,  cedo a la tentación de quebrantar mi propia política.

Por eso, hay que hacerse consciente de un posible desafío a superar: Las compras compulsivas. Es un comportamiento caracterizado por la necesidad irresistible de comprar objetos o bienes de manera impulsiva y sin una planificación previa. Este tipo de comportamiento puede ser problemático y llevar a dificultades financieras, estrés emocional y otros efectos negativos en la vida de una persona.

Hay que analizarse a sí mismo y entender las razones que puede haber detrás del comportamiento:  Analistas de la conducta citan algunas:

Impulso emocional: Las compras pueden ser una forma de lidiar con el estrés, la ansiedad, la tristeza o el aburrimiento. Comprar algo nuevo puede brindar una sensación temporal de satisfacción o alivio emocional.

Gratificación instantánea: El acto de comprar y obtener algo nuevo puede liberar dopamina en el cerebro, lo que genera una sensación de recompensa y satisfacción. (Ojo, puede derivar en una adicción).

Influencia social y publicidad: La publicidad y las redes sociales pueden crear una presión para comprar productos o seguir tendencias, lo que lleva a compras impulsivas para ajustarse a ciertas normas sociales o sentirse parte de un grupo.

Factores culturales y familiares: El ambiente en el que se creció y las creencias culturales pueden influir en el comportamiento de compra de una persona.

Dificultad para resistir tentaciones: Algunas personas tienen una baja capacidad para resistir el impulso de comprar cuando se les presenta la oportunidad.   En este sentido, me recuerdo a mí misma un texto de la Biblia que dice: Porque todo lo que hay en el mundo, los deseos de la carne, los deseos de los ojos, y la vanagloria de la vida, no proviene del Padre, sino del mundo (1 Juan 2:16). Siempre habrá mucho nuevo que ver y que comprar, y que no necesito o no puedo pagar… hay que tomar y dejar.

Para manejar las compras compulsivas, es fundamental tomar medidas para cambiar el comportamiento y desarrollar hábitos de consumo más saludables.

Si tememos que es un problema, puede que ya lo sea. Hay que admitirlo y disponerse a corregirlo.

Como dije al inicio a mí me ayuda, el establecer un presupuesto y hacer listas de compras antes entrar a las tiendas.

Identificar desencadenantes emocionales: Reflexiona sobre las emociones que pueden estar llevándote a comprar impulsivamente y busca alternativas saludables para manejar esas emociones.

Algunos recomiendan limitar el acceso a compras impulsivas, eliminando las aplicaciones de compra o desactivando las notificaciones de ofertas.

El manejo de las compras compulsivas puede llevar tiempo y esfuerzo. Hay que ser paciente consigo mismo y buscar apoyo cuando sea necesario.


lunes, 4 de septiembre de 2023

EL TRABAJO REMOTO: TRANSFORMACIÓN PERSONAL Y PROFESIONAL

 


En el mundo laboral, antes de la pandemia del Covid-19 y la explosión tecnológica, mi rutina diaria involucraba interminables desplazamientos hacia y desde la oficina. Horas perdidas en el tráfico, comidas rápidas y la necesidad de mantener una vestimenta adecuada eran parte de mi vida cotidiana. Pero ¿quién hubiera pensado que esta rutina cambiaría drásticamente?

Durante más de 30 años, mi vida laboral estuvo atrapada en la telaraña de la oficina. Los momentos gratificantes incluían interacciones con colegas, reuniones productivas y esos valiosos descansos para el café y bocadillos compartidos en persona. Sin embargo, algo estaba a punto de cambiar.

El Salto al Trabajo Remoto

De repente, me encontré en la esfera virtual del trabajo remoto, un cambio que inicialmente me desconcertó. Pero a medida que el tiempo pasaba, comenzaron a destacar los beneficios. La flexibilidad horaria se convirtió en mi nueva aliada, a pesar de las llamadas de madrugada o de tarde debido a las diferentes zonas horarias de mi equipo disperso por el mundo.

No tener que salir a toda prisa bajo la presión del tiempo y enfrentar las inclemencias del clima fue un alivio. Mi productividad experimentó un aumento notable, gracias a la capacidad de concentrarme en mi trabajo sin las distracciones de la oficina.

Sin embargo, no todo fue color de rosa. El aislamiento y la falta de interacción social se volvieron compañeros incómodos en mi nueva realidad laboral. Las conversaciones a través de cámaras y micrófonos nunca pudieron replicar la espontaneidad de las charlas de pasillo y las reuniones presenciales.

La disciplina se convirtió en un desafío constante. La línea entre el trabajo y la vida personal se volvió difusa, y aprender a desconectar se convirtió en una necesidad. Además, la tecnología, que era nuestra salvación, en ocasiones se volvía el villano, cuando una conexión a Internet fallaba o los equipos no respondían.

Mi testimonio es solo una pieza del rompecabezas del trabajo remoto. Cada persona tiene su propia historia que contar, sus propios beneficios y desafíos que enfrentar. Algunos pueden abrazar esta modalidad de trabajo con los brazos abiertos, mientras que otros añoran el bullicio de la oficina.

Lo que he aprendido a lo largo de esta experiencia es que el trabajo remoto es una oportunidad que debe ser sopesada cuidadosamente. Encontrar el equilibrio adecuado entre flexibilidad y disciplina es esencial. Al final del día, lo importante es que el trabajo remoto se ajuste a nuestras necesidades y objetivos personales.