¿Alguna vez has sentido miedo de compartir tu fe o de enfrentar el rechazo por seguir a Cristo? En Mateo 10:26–33, Jesús nos muestra cómo vencer nuestros cuatro temores más grandes.
Jesús tiene la
verdad
Él nos recuerda que la Palabra de Dios no puede ser escondida ni silenciada.
Aunque el mundo quiera cancelar u ocultar la verdad, nuestra misión es
proclamarla con valentía. Lo que Jesús te enseña en la intimidad, compártelo.
No te avergüences del evangelio; más bien, sé parte de una iglesia que proclama
con firmeza la verdad de Dios.
Jesús tiene el future
en sus manos
Hay algo más importante que el cuerpo: el alma. Jesús dice que no debemos temer
a quienes pueden dañar nuestro cuerpo, sino al único que tiene autoridad sobre
el alma. Temer a Dios no significa huir de Él, sino vivir con respeto y
reverencia. Como alguien dijo: “Tu miedo puede ser más peligroso para ti que
aquello que temes”.
Jesús cuida de ti
Dios está atento a cada detalle de tu vida. Él es soberano y está profundamente involucrado en Su creación. Tanto así, que cuenta cada cabello de tu cabeza. No estás solo. Él está presente, cercano y cuida de ti con amor personal. Si atiende a las avecillas, cuánto más a nosotros.Jesús tiene el veredicto final
Confesar a Cristo requiere valentía. No temas al juicio de los demás, porque
solo Dios es el Juez. Lo más importante es Su aprobación. Al reconocerlo
públicamente, demuestras que tu fe está puesta en Él, y Él te reconocerá ante
el Padre.