Una sabia y conocida anécdota dice que en una ocasión, un Sultán soñó que había perdido todos los dientes. Después de despertar, mandó llamar a un Adivino para que interpretara su sueño. -¡Qué desgracia Mi Señor! -exclamó el Adivino- Cada diente caído representa la pérdida de un pariente de Vuestra Majestad.¡Qué insolencia! -gritó el Sultán enfurecido- ¿Cómo te atreves a decirme semejante cosa? ¡¡Fuera de aquí!!! Llamó a su guardia y ordenó que le dieran cien latigazos.
Más tarde ordenó que le trajesen a otro Adivino y le contó lo que había soñado. Éste, después de escuchar al Sultán con atención, le dijo: -¡Excelso Señor! Gran felicidad os ha sido reservada. El sueño significa que sobreviviréis a todos vuestros parientes.
El semblante del Sultán se iluminó y con una gran sonrisa... ordenó que le dieran cien monedas de oro al segundo Adivino.
Cuando éste salía del palacio, uno de los guardias le dijo admirado: -¡No es posible! La interpretación que habéis hecho de los sueños es la misma que la del primer Adivino. No entiendo por qué al primero le pagó con cien latigazos y a ti con cien monedas de oro.
Cuando éste salía del palacio, uno de los guardias le dijo admirado: -¡No es posible! La interpretación que habéis hecho de los sueños es la misma que la del primer Adivino. No entiendo por qué al primero le pagó con cien latigazos y a ti con cien monedas de oro.
-Recuerda buen amigo mío - respondió el segundo Adivino - que todo depende de la forma en que decimos las cosas...
Uno de los grandes desafíos de la humanidad es aprender el arte de comunicarse y a decir las cosas de tal manera que no hieran al otro, no hablar con prepotencia, agresividad ni violencia, es mejor hablar con humildad, con amor y serenidad para no ir lastimando a los demás, muchas veces nos creemos superiores y nuestro ego nos lleva por el camino de ir lastimando a los demás con nuestra forma de hablar, un gesto, un comportamiento y una palabra mal usada nunca te imaginas el daño que puedes causar.
RECUERDA QUE TODO DEPENDE DE LA FORMA EN QUE DECIMOS LAS COSAS.
-Desconozco su autor-
Hola Querida Georgina, sin saberlo este articulo se ha convertido en la fuerza de este dia en mi vida. Siempre he dicho que el decir lo que pensamos o lo que creemos sobre algo o alguien no esta mal, no obstante el decir las cosas con palabras hirientes es como estocadas al corazón de la otra persona. La biblia dice: La lengua tiene el poder de sanar y a la vez herir, todo depende como esta sea utilizada por nosotros"
ResponderEliminarEn la actualidad se dan muchos casos de esta indole, sobre todo en las relaciones de parejas. Por ejemplo, hay muchas cosas que no nos gustan de nuestra pareja, eso es lógico ya que es la unión de dos personas que son totalmente diferente y ajenas al tipo de educación que han tenido, una vez recuerdo que mi madre me comento que habian muchas cosas que no le agradaban de mi padre, por ejemplo la forma en como se vestia. Me cito dos expresiones de las cuales la elección determinaria su relación con él. Me dijo, fijate le puedo decir de dos maneras:
1-"No me gusta tu forma de vestir, es mas es super rara, es que en tu casa o familia no te enseñaron a comprar ropa, es ridiculo lo que te pones, es mas me da verguenza salir contigo a la calle con ese atuendo"
2-"Mi amor sabes algo, me gustaria que te probaras otro tipo de vestimenta, la que usas esta bien, pero me gustaria verte en otra versión para que fueras cambiando un poquito tu estilo de vida, se que te quedara bien"
Entonces, en la forma que decimos la cosas determina que tipo de influencia ejercemos sobre los demás, y eso también dice que tip de personas somos nosotros.
Urbanelis Gomez
Muy valioso tu aporte a esta reflexion, con un ejemplo tan practico. Es una leccion para aplicar a diario en nuestras interacciones con los demas.
ResponderEliminarHoy le tuve que pedir una sonrisa a un joven que me atendia con unas fotocopias, pues su rostro lucia tan rigido, como malhumorado, primero como que se extrañò, pero luego se sonrio, y su rostro cambiò para beneficio de los clientes que les tocò atender despues de mì. Dios està atento y activo, tanto en las cosas pequeñas como en las grandes.
gracias por dar enseñanzas tan practicas,stoy orando para cambiar mi forma de decir las cosas que por muy bien intencionadas que sean si no expresan mi amor y delicadeza pueden no lograr el respeto de la tra persona.. vicky de PERÚ
ResponderEliminarlA BIBLIA DICE QUE HABLEMOS LA VERDAD CON AMOR...DEFIDE